“Verano en diciembre”, el día que el teatro vino a vernos, para
enseñarnos que la ficción no siempre está muy lejos de la realidad.
Nos propusimos leer “Verano en diciembre” un poco por
sorpresa y por recomendación de nuestra compañera Ana.
Todos coincidimos que fue una grata sorpresa y no solo por
poder contar con la visita de Carolina
África Martín (autora, directora y actriz de uno de los personajes en su
representación), sino por la frescura y cercanía de la obra.
La historia nos cuenta la vida de una familia compuesta por
cinco mujeres, las cuales se enfrentan de una manera muy distinta en su día a día.
Sus problemas, pasiones, temores y
secretos se entrelazan con sus quehaceres cotidianos y con la forma de relacionarse
entre ellas, pero con una naturalidad que en ningún momento te hace sentir incómodo.
Según avanzamos en su lectura, la cotidianidad de los personajes hace que te
identifiques con ellos, la ficción en esta ocasión, está
muy cerca de muchas de nuestras realidades. Los personajes, gracias a esa cercanía,
se hacen querer en mayor o menor medida
aunque con muchos matices.
Yo me quedo con la abnegación de la madre, donde vi
reflejada muchas actitudes que he vivido en primera persona.
La crudeza de la abuela, que a pesar de la pérdida de la
memoria, los momentos de lucidez rasgan como cuchillos recordando retazos de su
infancia.
En cuanto a las hijas,
todas buscan una vida liberadora con la que sentirse satisfechas, pero siempre arrastradas por el ancla que supone la actitud materna.
En definitiva, fue como asomarse a un espejo o a una de esas atracciones con espejos que vemos con alguna
distorsión, pero en definitiva una imagen muy cercana a la realidad.
Después de la lectura y tras la charla con Carolina África
Martín, solo me queda darle las gracias por haber aceptado la invitación y emplazarla
para volvernos a ver en el teatro y
por qué no en próximas tertulias.
Estará el dibujo de Lorca pensando en su Bernarda Alba?
ResponderEliminarYo diría que sí.
ResponderEliminarDesde el comienzo de la lectura yo tenía in mente la obra lorquiana.
Carolina conoce profundamente el alma femenina y ha mimado muchísimo a todos sus personajes.
Fue muy interesante conocer de primera mano la gestación de la obra y detalles de la dirección y puesta en escena de la misma.
Gracias por una velada tan agradable y productiva.